El nombre local de la isla es Rapa Nui, que significa isla grande. En su idioma autóctono la isla antiguamente se conocía como Te pito o te henua, que significa «El ombligo de la Tierra». Y el nombre de Isla de Pascua le fue dado por el navegante Jakob Roggeveen, que la descubrió el 5 de abril de 1722, fecha correspondiente al día de Pascua de Resurrección. Con este nombre y sus traducciones es como se conoce a la isla en la actualidad.
Tienen idioma propio con 14 letras con raices Maories, aunque según ellos sólo comparten con el lenguaje maori “hola” y “adios”. No obstante documentación de la época demuestra que los Rapa Nui y los Tahitianos se podían entender en sus idiomas propios, por lo que no sería tanta la diferéncia con otras etnias polinésicas.
El hilo conductor de nuestra visita a la isla son los moais, y a través de ellos hemos ido desgranando los origenes de la población Rapa Nui, sus formas de vida ancestrales, sus tradiciones, folklore y creencias.
Su folklore está lleno de leyendas que intentan dar respuesta a cuestiones como de qué manera bajaban a los moais de la cantera y cómo se trasladaban a sus Ahu, y que los moáis estuvieran todos caídos boca abajo en la leyenda Cuando los Moai caminaban; Y por qué todos los anzuelos de los Rapa Nui se tallaban en hueso, en la historia del Anuelo de Rapa Nui; O versionan de manera real o ficticia su história explicando cómo llegaron a la isla siguiendo la visión de su rey Hatu Matua.
Anakena es la única playa de la isla y es a donde llegaron los primeros colonizadores a la isla. En sus inicios Anakena fué el centro principal de la isla, y lugar donde residía el Ariki (el rey). Posteriormente la población se estableció hacia el interior, junto a las áreas de cultivo. En el litoral quedaron establecidos los centros religiosos o Ahus, los centros políticos y los ceremoniales, dónde adoraban a los ancestros casi deificados representados por los moais.
En esta playa se encuentran en la actualidad 6 moais en una plataforma y un moai de otra época solo.
Pero cómo vivían los Rapa Nui? Visitamos Puku Manu Mea, un asentamiento ancestral donde pudimos ver la forma de vida de sus habitantes:
Las casas tenían una base de piedra sobre la que construían un techo ovalado con cañas recubierto de hojas de palmera. Las casas se reservaban para los nobles, aunque en general nadie dormía dentro ya que la temperatura permitía dormir fuera, excepto en caso de tormenta.
Al lado de las casas habían unas construcciones de piedra que resultaron ser los gallineros. La gallina fue el animal que los Rapa Nui trajeron de su isla de origen, y era un bien muy preciado, es por ello que que les construyeron corrales de piedra, para evitar que otros clanes las robaran.
Por el tipo de construcción y apertura de los corrales se hacía imposible recoger los huevos de las gallinas, pero sea como sea la cuestión de los huevos en esta isla es un tanto compleja (ver más abajo tradición del hombre pájaro), no nos queda claro si son considerados un bien sagrado, o si la idea era que nacieran más pollitos.
Entre la casa y el gallinero quedaba la cocina, que era básicamente un hoyo en la tierra dónde se cocinaba durante aproximadamente 4hs el curanto pascuense, con leña y piedras al rojo vivo.
Las plantas y arboles pequeños se rodeaban con cercas de roca para proegerlas del viento y mantener la humed de la lluvia.
Cuando llegaron los primeros colonizadores a la isla, la única fruta local era la banana. Los Maories trajeron las frutas y otros vegetales que se encuentran ahora en la isla, como el mango, la uva, la palta (aguacate), el taro (la patata dulce), la piña, la papaya, la caña de azúcar, la calabaza, el tabaco, etc.
En Ana Te Pahu descubrimos unas cuevas que los antiguos Rapa Nui usaban como refugios en caso de ciclones o fuertes tormentas. Visitamos la cueva de los plátanos, cuya entrada quedaba por debajo del nivel de la tierra, y en este jardín protegido los rapa nui plantaron sus frutas, para tener la comida cerca en caso de tener que refugiarse durante mucho tiempo.
Que razón de ser tenían los Moais?
Los moais son el recuerdo de una persona importante que murió, se construyeron con la intención de representar a sus ancestros, y todos ellos (excepto 7 que miran hacia el mar) miran hacia el interior de la isla, hacia la Aldea Ceremonial.
Las plataformas o “ahus” donde de colocaban a los moais están colocadas en base a posiciones astronómicas: salida y puesta del sol, posición de la luna y posiciones de las estrellas. Son datos importantes para la agricultura y para saber ubicar otras islas en la época antigua.
El Ahu más importante es el Ahu Tongariki donde después de la restauración se pueden ver 15 moais juntos.
En Ahu A Kivi se encuentran los 7 moais mirando hacia el mar, y representan a los 7 navegantes que partieron de Hiva a buscar una nueva tierra, la isla de Rapa Nui. Se entiende que estos moais miran hacia su isla de origen.
Los primeros moais datan del siglo XI, siendo la época de esplendor el siglo XV. El más pequeño mide 1,10m y el mayor 22m. Se tallaban en una sola piedra directamente de la roca madre con herramientas hechas con obsidiana.
Rano Raharaku es la cantera donde se tallaban los moais. En las laderas de la montaña se pueden ver unos 300 moais aparentemente terminados, pero no lo están. Solo cuando los moais llegaban a la plataforma donde iban a ser colocados se les esculpía la cuenca de los ojos, y se les colocaba los ojos y el moño en una ceremonia que transmitía el Mana, dando “vida” a los moais.
Todos los moais debían ir sobre plataformas. Ninguno de los moais que se encuentran sin plataforma tienen moño ni cuencas, lo que significa que nunca “se levantaron” ni cobraron vida. Por tanto se cree que se cayeron en el traslado y nunca se recogieron para ser llevados a su lugar, sencillamente se abandonaron. Se cree que quizas traería mala suerte si se caen, esten rotos o no.
Cuando se pedían los moais a la cantera se definía ya el tiempo y en qué plataforma iban a ser colocados, para preparar el camino para el traslado.
Todos los moais son hombres menos uno que tiene formas femeninas, está hecho en obsidiana y actualmente se encuentra en el museo.
En Puna Pau se encuentra la cantera para los moños del moai, que se talla con escoria roja (espuma de lava).
Misterios de la isla de Pascua:
Actualmente gran parte de los moais están caídos. Hay varias teorías: un ciclón o guerras tribales – es la teoría más plausible ya que todos están caidos sobre la cara y con el moño tb caído.
Se han encontrado 2 ojos, uno de coral blanco y el iris hecho de roca de escoria, y otro ojo de coral blanco con el iris de obsidiana. Hay más de 300 moais en la isla que se alzaron en sus plataformas pero es un misterio a donde han ido a parar los ojos, pudieron ser escondidos o enterrados o tirados al mar.
La aldea religiosa llamada Orongo se construyócomo lugrar sagrado y únicamente con fines religiosospara llevar a cabo la ceremonia del hombre pájaro,cuando se inició el culto al ave Manutara. Desde el volcán Rano Kau se iniciaba la competición de Tangatamanu, dónde el campeón llevaba el huevo a su rey, y éste cogía el huevo y se lo quebraba en la cabeza, momento en el que se convertía en el hombre pájaro (rey político) de la isla durante un año.
La última ceremonia vista fue el 1867 y los petroglifos son un arte ceremonial que se encuentra sobre todo en esta zona.
En la actualidad el volcán Rano Kau es importante debido a las marismas creadas en su caldera, que debido a la humedad crea una area de protección de flora naitiva importante para mantener vivas las especies endémicas de la isla.
Y en Te Pito Kura, literamente “ombligo rojo” u “ombligo de plumas”, además de ser un area donde hay muchos gallineros, es el lugar donde se encontró la piedra magnética. Existen 3 piedras con alto magnetismo, dos bajo el mar en la misma zona, y una en Te Pito Kura. Estas piedras provenían del volcán cercano y han causado expectación entre los turistas.